Vol. 40 (Nº 21) Año 2019. Pág. 30
LONDOÑO-AYALA, Yesney E. 1; MARTÍNEZ-MONTOYA, Diego F. 2 y OSPINA-ESPINOZA, Oscar A. 3
Recibido: 13/03/2019 • Aprobado: 03/05/2019 • Publicado 24/06/2019
RESUMEN: La movilidad social, ha sido estudiada en América Latina desde hace varias décadas, toda vez que constituye una de las herramientas más eficaces en la lucha contra la pobreza y la desigualdad en la región. A pesar de ello, la falta de información estadística de larga data, no permite realizar estudios profundos y concluyentes con datos de panel que permitan obtener información de quienes rechazan su “herencia social” y por el contrario ascienden o descienden en la escala social. En este estudio analizamos los niveles de movilidad social en Colombia, a partir del nivel educativo de los padres y sus hijos, encontrando que los niveles de movilidad social se han incrementado en lo corrido del nuevo siglo, en comparación con los obtenidos en la segunda mitad del siglo pasado. |
ABSTRACT: Social mobility has been studied in Latin America for several decades, since it is one of the most effective tools in the fight against poverty and inequality in the region. Despite this, the lack of long-standing statistical information does not allow in-depth and conclusive studies with panel data to obtain information from those who reject their "social inheritance" and, on the contrary, ascend or descend in the social scale. In this study we analyze the levels of social mobility in Colombia, from the educational level of parents and their children, finding that levels of social mobility have increased in the course of the new century, compared to those obtained in the second half the last century. |
El análisis de la movilidad social ha sido una constante en América Latina, toda vez que muestra lo determinantes que pueden ser las condiciones de vida iniciales de una persona, lo que se conoce como “herencia social”, en el cumplimiento de sus objetivos y logros de vida. En la medida en que la movilidad social es mayor, un lugar geográfico con altos niveles de pobreza y desigualdad puede avanzar en el curso de algunas generaciones hasta convertirse en una zona con altos ingresos y bajos niveles de desigualdad, que es precisamente uno de los anhelos de la sociedad latinoamericana.
En tal sentido, algunos trabajos realizados en lo corrido del presente siglo, como ejecutado de Behrman, Gaviria y Székely (2001) muestran bajos niveles de movilidad social en América Latina asociados a los niveles de escolarización propios de los sujetos de estudio, sin indagar demasiado en los mecanismos de transmisión de padres a hijos de su “herencia social”. Dos años más tarde, Ferranti, Perry, Ferreira, et al (2003) encuentran que América Latina no ha experimentado cambios notorios en la movilidad social de su población, con excepción de Brasil y Panamá donde son evidentes los incrementos en los niveles de movilidad social. Posteriormente, Conconi, Cruces, Olivieri y Sánchez (2008) encontraron a partir del estudio de tres índices de movilidad, que existen relaciones entre pobreza y desigualdad en América Latina, aunque no dilucidaron las relaciones de causalidad o la dirección de las mismas. Algunos años más tarde, Mediavila y Calero (2010) estudiaron también la movilidad social en seis países de América Latina, Argentina, Brasil, Chile, México, Perú y Venezuela, encontrando que existe una clara relación educativa entre la educación de los padres y los hijos, aunque no es suficiente para indicar que existen niveles de movilidad social, como consecuencia de restricciones en la movilidad laboral observada en los países.
En el caso particular de Colombia, algunos estudios recientes y destacados como el realizado por Tenjo (2004) exploran las relaciones a partir de las cuales se lleva a cabo la movilidad social en el país, indicando que la educación de los padres y particularmente de la madre, explican en gran parte los mayores niveles educativos de los estudiantes en el país, aunque Gaviria (2010) argumenta que los cambios sociales experimentados en Colombia en la segunda mitad del siglo pasado, incluidas las pequeñas mejoras en movilidad social, se debe entre otros, a la mayor cobertura en educación que alcanzó el país y no necesariamente a la influencia de que tienen los padres sobre los hijos, conclusión parecida a la obtenida por Angulo, Azevedo, Gaviria y Páez (2012) quienes concluyen que las mejoras en la movilidad social se deben a los progresos en la cobertura educativa, aunque es obstaculizada por las pocas oportunidades de ascenso laboral en el país.
En este artículo se emplean las Encuestas de Calidad de Vida publicadas por el DANE, con el fin de estudiar los niveles de movilidad social existentes en Colombia en 2017, tomando como base la educación obtenida por los padres y sus hijos. El artículo se desarrolla como sigue: Luego de esta introducción se presenta la metodología empleada, posteriormente se analizan las características de los datos utilizados en el estudio y por último se presentan los resultados y las conclusiones del trabajo.
Para desarrollar el estudio se emplearon datos de la Encuesta de Calidad de Vida del DANE de 2017 para Colombia, de la cual se extrajeron datos correspondientes al nivel educativo de 2.573 hijos mayores de 25 años y de sus respectivos padres, agregándolos en las siguientes categorías:
Primaria y Menos
Corresponde a aquellas personas que sólo completaron la primaria, tienen primaria incompleta, preescolar o que no asistieron a la escuela.
Secundaria o Media
Hace referencia a los individuos que cuentan con la educación básica secundaria y la media vocacional.
Técnico o Tecnológico
Comprende a aquellos individuos que adelantaron estudios de educación técnica y tecnológica, independientemente de que se hayan graduado o no.
Universitario o Postgrado
Incluye a personas que adelantaron cursos de pregrado y postgrado, independiente de que se hayan graduado o no.
Con esta información, se estructuraron matrices de nivel educativo para padres e hijos, con el fin de confrontar los avances y retrocesos en la materia en el país, analizando los resultados totales y desagregados por grupos etarios. Algunas metodologías similares son desarrolladas para la ciudad por Agudelo y Ospina (2019).
El análisis de la movilidad social mide la frecuencia con que ocurren los movimientos de una posición social a otra, estableciendo si existe relación entre las posiciones sociales pasadas y las actuales. Usualmente la movilidad social se analiza a partir de la posición educativa de los hijos y sus padres, a partir de la cual se estudia la transmisión intergeneracional del capital humano. De manera que existe baja movilidad social cuando los hijos replican los logros educativos de los padres y por el contrario alta movilidad hacia arriba o hacia abajo, cuando los hijos no reproducen los logros educativos de sus progenitores.
La muestra empleada en este artículo implica el análisis de 2.573 individuos, con edades superiores a los 25 años, edad a la que se supone ya los individuos han culminado la totalidad de sus estudios. El análisis general de los datos estudiados, muestra un nivel importante de movilidad social ascendente, es decir, de aquellos individuos que superan la educación de sus padres:
Tabla 1
Movilidad Social para
toda la población.
|
Nivel educativo del jefe de hogar |
|||
Nivel educativo del hijo |
Primaria y Menos |
Segundaria o Media |
Técnico o Tecnológico |
Universitario o Postgrado |
Primaria y Menos |
31,3% |
9,5% |
2,6% |
2,9% |
Segundaria o Media |
49,7% |
43,8% |
25,0% |
6,4% |
Técnico o Tecnológico |
11,1% |
20,8% |
21,1% |
10,7% |
Universitario o Postgrado |
7,9% |
25,9% |
51,3% |
80,0% |
El 68.7% de los hijos de padres que tenían niveles de estudio iguales o inferiores a primaria, obtuvieron niveles educativos superiores al de sus padres, con un notable 19% de hijos que accedieron a la denominada “educación terciaria”. Algo similar ocurrió en el caso de los padres que sólo contaban con educación secundaria o media vocacional: El 46.7% de sus hijos superaron sus niveles educativos. Una muestra inequívoca de movilidad social ascendente: Los hijos superaron la “herencia social” de sus padres. Por el contrario, el 20% de los hijos de padres con títulos universitarios o de postgrado, no alcanzaron la titulación de sus padres, convirtiéndose en un claro ejemplo de movilidad social negativa, que es aquella en la que los individuos no alcanzan el nivel obtenido por sus padres.
Sin embargo, el análisis de la totalidad de la muestra encarna un sesgo generacional importante: las personas más jóvenes disfrutaron del incremento de la cobertura escolar que comenzó en las últimas décadas del siglo pasado e inicios del presente, mientras que las más adultas no lo hicieron, por lo que analizar los datos de acuerdo a la composición etaria de la población puede dar luces respecto a los avances en movilidad social.
Tabla 2
Movilidad Social – Hijos con
edades entre 40 y 65 años.
|
Nivel educativo del jefe de hogar |
|||
Nivel educativo del hijo |
Primaria y Menos |
Segundaria y Media |
Técnico y Tecnológico |
Universitario y Postgrado |
Primaria y Menos |
43,8% |
13,7% |
0,0% |
10,5% |
Segundaria y Media |
40,7% |
46,3% |
23,1% |
5,3% |
Técnico y Tecnológico |
6,9% |
14,7% |
15,4% |
10,5% |
Universitario y Postgrado |
8,5% |
25,3% |
61,5% |
73,7% |
La tabla 2 muestra la matriz de resultados para los hijos que cuentan con edades que oscilan entre los 40 y 65 años, que en su mayoría no experimentaron las mejoras de la expansión en cobertura educativa que hubo en Colombia, en las últimas décadas del siglo pasado. El 56.2% de los hijos de padres que tenían niveles de estudio iguales o inferiores a primaria, obtuvieron niveles educativos superiores al de sus padres, de los cuales el 15.5% de hijos obtuvieron niveles educativos de técnicos, tecnólogos o profesionales universitarios, lo que implica una leve desmejora frente al total de la población analizada, al igual que lo observado en los hijos de padres profesionales: el 26.3% no alcanzó el nivel de sus padres, lo que constituye un ejemplo claro de una mayor movilidad social descendente.
Tabla 3
Movilidad Social – Hijos con edades entre 25 y 40 años.
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Nivel educativo del jefe de hogar |
|||
Nivel educativo del hijo |
Primaria y Menos |
Segundaria y Media |
Técnico y Tecnológico |
Universitario y Postgrado |
Primaria y Menos |
23,6% |
8,3% |
3,2% |
1,7% |
Segundaria y Media |
55,1% |
43,3% |
25,4% |
5,8% |
Técnico y Tecnológico |
13,7% |
22,3% |
22,2% |
10,8% |
Universitario y Postgrado |
7,5% |
26,1% |
49,2% |
81,7% |
El caso más notable de movilidad social ascendente se observa en el rango inferior de edades, que incluye a hijos de entre 25 y 40 años y que se observa en la tabla 3: El 76.4% de los hijos de padres con educación primaria o menos obtuvieron niveles de educación superiores a los de sus padres, con un 21.2% de hijos que alcanzaron educación técnica, tecnológica o universitaria, porcentaje que crece hasta el 40% en el caso de los hijos de padres con educación secundaria o media vocacional. De igual forma, en este rango de edad se registra la menor proporción de movilidad social descendente: el 18.3% de los hijos de universitarios no alcanzaron su nivel educativo, porcentaje que se reduce a un 8.3% en el caso de quienes tienen secundaria o media vocacional.
En general, en Colombia se observa algún nivel de transmisión intergeneracional de capital humano, con altos niveles de movilidad social ascendente, particularmente en los grupos más jóvenes de hijos, como consecuencia del incremento en la cobertura educativa que se observó en el país en los últimos 30 años, lo que es particularmente cierto para aquellos cuyos padres tenían bajos niveles de educación, principalmente para aquellos que sólo contaban con educación primaria o menos. De igual manera se registró una notoria reducción de movilidad social descendente en los hijos de padres con educación universitaria o de posgrado. Caso contrario ocurre con aquellos hijos de edades comprendidas entre 40 y 65 años, toda vez que registran unos niveles inferiores de movilidad social ascendente y niveles más elevados de movilidad social descendente, particularmente en el grupo de padres con educación universitaria o de posgrado.
En este trabajo se emplearon datos de la Encuesta de Calidad de Vida del DANE de 2017 para Colombia con el fin de analizar los patrones de movilidad social ascendente y descendente en Colombia. Gracias a este tipo de análisis es posible analizar las posibilidades que tiene un individuo de alcanzar sus logros y objetivos de vida independientemente de su “herencia social”.
Los análisis desarrollados muestran que en los últimos años las posibilidades de movilidad social ascendente se han incrementado notoriamente, particularmente en aquellos con edades inferiores a los 40 años, como consecuencia de la mayor cobertura educativa que se registró en los últimos 30 años en el país. De igual manera, para los grupos más jóvenes se observaron notorias reducciones en la movilidad social descendente, que es aquella en la cual los hijos no logran obtener los mismos títulos académicos que sus padres.
Próximos trabajos estarán enfocados en analizar la movilidad social desde el punto de vista de los ingresos y posición social de los individuos, toda vez que como se ha documentado en algunos países del mundo, a pesar de que puede existir alta movilidad social analizada desde el punto de vista de la educación, las barreras laborales y sociales entorpecen el curso de la misma durante el transcurso de la vida de un individuo.
Agudelo, J y Ospina, O. (2019). Infraestructura pública y valorización en Medellín. Ed. Optimal Research.
Angulo R.; Azevedo J.; Gaviria A. y Páez G (2012). Movilidad social en Colombia. Documentos del Centro de Estudios sobre el Desarrollo Económico, 43, 1–29.
Behrman J.; Gaviria A. y Székely M (2001).Intergenerational Mobility in Latin America.Journal of Lacea Economía 2(1): 1-31.
Conconi A.; Cruces G.; Olivieri S. y Sánchez R (2007). E pur si muove? Movilidad, Pobreza y Desigualdad en América Latina. Económica: Revista del departamento de economía de la Universidad Nacional de La Plata 2: 121-159.
De Ferranti D; Perry G.; Ferreira F. y Walton M (2004). Inequality in Latin America: breaking with history?. Washington, D.C. Estados Unidos. World Bank Publications.
Gaviria A (2010). Cambio social en Colombia durante la segunda mitad del siglo XX. Documentos del Centro de Estudios sobre el Desarrollo Económico. 30: 1-40.
Mediavilla M. y Calero J (2010). Movilidad educativa en Latinoamérica. Un estudio para seis países. Revista Española de Educación Comparada. 16: 1-12.
Tenjo, J. (2004). Educación y movilidad social en Colombia. Documentos de Economía Universidad Javeriana. 408: 1 – 43.
1. Departamento de Investigaciones. Optimal Research. Ingeniera Financiera y de Negocios, Tecnóloga en Análisis de Costos y Presupuestos. ylondono@optimalresearch.com.co
2. Departamento de Finanzas. Instituto Tecnológico Metropolitano - ITM. Ingeniero Administrador. diegofdomm@gmail.com
3. Departamento de Finanzas. Instituto Tecnológico Metropolitano - ITM. Ingeniero de Sistemas. oscarospina2515@gmail.com